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Política
Ciudadanos mantiene a Bal en el Congreso pero nombra a Guillermo Díaz coordinador para controlar el grupo parlamentario
La dirección mantiene "de momento" la actual estructura de la delegación en el Congreso pero designa a un afín a Arrimadas como nexo con la cúpula
El tándem Guasp-Vázquez ya anota sus primeros puntos. La nueva dirección de Ciudadanos ha logrado apagar el gran incendio que generaba incertidumbre en el partido, la salud del grupo parlamentario, y mantendrá "de momento" la actual estructura en la delegación en el Congreso: Inés Arrimadas será la líder parlamentaria y Edmundo Bal, pese a la pérdida de confianza con la ex presidenta naranja, continuará como portavoz adjunto.
No obstante, la dirección de Ciudadanos ha acordado la creación de un nuevo cargo que, a modo de nexo con la cúpula, coordinará la relación entre la Ejecutiva del partido y un grupo parlamentario repleto de voces críticas con la nueva dirección de los liberales. Un puesto que recaerá sobre Guillermo Díaz, portavoz del equipo que pilotó la refundación de Ciudadanos y único diputado que respaldó abiertamente a Inés Arrimadas en el proceso de primarias.
El grupo parlamentario era, desde que culminó la Asamblea General el fin de semana pasado y el camino de refundación, el elefante en la habitación de Ciudadanos. La mayoría de sus nueve diputados respaldan a Edmundo Bal frente a Inés Arrimadas, que seguirá de líder en el Congreso a pesar de sólo contar con el apoyo explícito de Díaz. Por ello, la salida de Bal de la Cámara Baja se daba por descartada.
Así, los contrapesos y las luchas de poder dentro de la formación naranja invitaban a creer que, pese a imponerse en las primarias, la candidatura de Patricia Guasp y Adrián Vázquez no ejecutaría grandes cambios en su punta de lanza, que es la delegación parlamentaria en el Congreso, sino que encumbraría a Arrimadas como líder parlamentaria del partido y mantendría a Bal como portavoz adjunto de la formación en el Congreso.
Adrián Vázquez, nuevo secretario general de Ciudadanos, ha destacado este lunes que, tras "muchas llamadas" y "buenas propuestas", la mejor decisión ha sido mantener la estructura actual en el Congreso. "Todos los activos del partido están completamente comprometidos", ha explicado para detallar la "muy buena sintonía" tras la crisis interna.
Estaba previsto que la nueva cúpula del partido anunciara el lunes pasado, apenas un día después de cerrar el cónclave de refundación, la continuidad o el cambio en la estructura del grupo. Pero los nuevos dirigentes aplazaron toda decisión y programaron una serie de encuentros "con todos" los diputados a lo largo de la pasada semana con el objetivo de "dar la vuelta" a la situación, según reconocían fuentes de la nueva directiva liberal.
EL Mundo
Ciudadanos mantiene a Bal en el Congreso pero nombra a Guillermo Díaz coordinador para controlar el grupo parlamentario
La dirección mantiene "de momento" la actual estructura de la delegación en el Congreso pero designa a un afín a Arrimadas como nexo con la cúpula
El tándem Guasp-Vázquez ya anota sus primeros puntos. La nueva dirección de Ciudadanos ha logrado apagar el gran incendio que generaba incertidumbre en el partido, la salud del grupo parlamentario, y mantendrá "de momento" la actual estructura en la delegación en el Congreso: Inés Arrimadas será la líder parlamentaria y Edmundo Bal, pese a la pérdida de confianza con la ex presidenta naranja, continuará como portavoz adjunto.
No obstante, la dirección de Ciudadanos ha acordado la creación de un nuevo cargo que, a modo de nexo con la cúpula, coordinará la relación entre la Ejecutiva del partido y un grupo parlamentario repleto de voces críticas con la nueva dirección de los liberales. Un puesto que recaerá sobre Guillermo Díaz, portavoz del equipo que pilotó la refundación de Ciudadanos y único diputado que respaldó abiertamente a Inés Arrimadas en el proceso de primarias.
El grupo parlamentario era, desde que culminó la Asamblea General el fin de semana pasado y el camino de refundación, el elefante en la habitación de Ciudadanos. La mayoría de sus nueve diputados respaldan a Edmundo Bal frente a Inés Arrimadas, que seguirá de líder en el Congreso a pesar de sólo contar con el apoyo explícito de Díaz. Por ello, la salida de Bal de la Cámara Baja se daba por descartada.
Así, los contrapesos y las luchas de poder dentro de la formación naranja invitaban a creer que, pese a imponerse en las primarias, la candidatura de Patricia Guasp y Adrián Vázquez no ejecutaría grandes cambios en su punta de lanza, que es la delegación parlamentaria en el Congreso, sino que encumbraría a Arrimadas como líder parlamentaria del partido y mantendría a Bal como portavoz adjunto de la formación en el Congreso.
Adrián Vázquez, nuevo secretario general de Ciudadanos, ha destacado este lunes que, tras "muchas llamadas" y "buenas propuestas", la mejor decisión ha sido mantener la estructura actual en el Congreso. "Todos los activos del partido están completamente comprometidos", ha explicado para detallar la "muy buena sintonía" tras la crisis interna.
Estaba previsto que la nueva cúpula del partido anunciara el lunes pasado, apenas un día después de cerrar el cónclave de refundación, la continuidad o el cambio en la estructura del grupo. Pero los nuevos dirigentes aplazaron toda decisión y programaron una serie de encuentros "con todos" los diputados a lo largo de la pasada semana con el objetivo de "dar la vuelta" a la situación, según reconocían fuentes de la nueva directiva liberal.
EL Mundo
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